Brian Tokar es miembro del equipo docente de Ecología Social del Goddard
College de Vermont, Estados Unidos.
Un mundo de monstruos
Las grandes multinacionales que dominan el comercio mundial de alimentos y cuyos intereses están fundidos con los de las grandes de los pesticidas y ahora la biotecnología, intentan la introducción masiva en nuestros alimentos de un nuevo tipo de vida: Los organismos manipulados genéticamente (OMG). Seres vivos cuyos genes son alterados con objeto de utilizarlos industrialmente. Virus, bacterias, levaduras, plantas, animales, seres humanos...
Alterando e intercambiando fragmentos genéticos de plantas, animales y personas, pueden lograrse seres de extraordinario interés comercial. Fantasías para los saturados paladares de los ricos. Cerezas con sabor a limón, maíz con sabor a mantequilla, etc.
Transformaciones de gran rentabilidad para la especulación, como el tomate que no se pasa, cuyo interés real no es otro que el facilitar su cultivo en países de mano de obra barata y su transporte, en buen estado aparente, a cualquier mercado del mundo, incluso por medios lentos pero baratos, como el barco.
Materias primas naturales como el cacao, la vainilla, el azúcar, pueden sustituirse por sucedáneos fabricados industrialmente a bajo precio. Naturalmente, esto hundiría las economías de países enteros del Tercer Mundo.
Los animales pueden convertirse por fin en lo que esa industria siempre ha soñado: máquinas, como las vacas a las que ya en USA se inyecta la hormona BST para que produzcan hasta un 25% mas de leche aunque, eso si, su vida se acorte, su salud requiera constantes tratamientos con fármacos que pasan al consumidor y sólo resulte rentable en grandes instalaciones. La implantación de este producto en USA está arruinando a millares de pequeños ganaderos.
Peligros incontrolables para la salud
Pese a la apariencia de seguridad científica con que se presenta al público, la manipulación genética esta plagada de incógnitas y es actualmente una tecnología brutal que sacrifica a decenas, cientos o miles de seres vivos cuyas monstruosidades no son las deseadas por los experimentadores. Los errores son frecuentes. Ha habido ya casos de reacciones alérgicas, parálisis y muertes en seres humanos.