Querida srta. Francis:
Soy profesor de matemáticas, y mi mujer controladora aérea, dos de las profesiones más odiadas de este país, aunque la mía sólo en la horquilla de 12 a 24 años de edad. Conozco a mi mujer desde hace treinta años, y yo la describiría como inteligente, trabajadora, desprendida, solidaria, afectuosa y muy responsable. Tiene un trabajo de gran responsabilidad, la seguridad aérea, y de alta cualificación, con un riguroso proceso de selección (100 plazas para 12.000 aspirantes en su convocatoria) y formación.
Mi matrimonio iba bien hasta hace un año, aproximadamente, cuando recibí la noticia de que mi mujer es una egoísta, privilegiada, insolidaria, avariciosa y perezosa, que va echando pulsos al Estado y tomando rehenes entre los pasajeros. Puede imaginar mi estupor; pero tengo que aceptar los hechos, el ministro Blanco tiene mucha más credibilidad que yo, y ya se sabe que el amor es ciego.
Lo cierto es que este último año su comportamiento ha cambiado: sale más por las noches, nos estropea dos de cada tres fines de semana diciendo que tiene que trabajar, está más cansada y estresada (no debe ser bueno para los aviones que controla) y, para colmo, pensaba quedarse sola todo el mes de Agosto, en vez de venir conmigo y con los niños a la playa. Según ella, tenía doscientas horas programadas en 28 días. ¿Se lo puede usted creer? Al final le convencí de que pidiera reducción de jornada por guarda legal (la peque tenía siete años), y trabajó la mitad (claro está, le pagaron la mitad).
Yo cada vez me creo menos lo que me dice; a primeros de Diciembre me dijo que ya había completado las horas anuales (¿así de mal se organiza AENA?), y tres días después dijo que no, que tenía que devolver las 100 horas de reducción de Agosto por necesidades del servicio. A mí me pareció bien, así el dinero que le descontaron en verano se lo pagarían ahora.
- Que no, que no me pagan lo que me descontaron.
- "¿Me tomas por tonto?'' (eso no se lo dije).
Hemos hablado varias veces de su conflicto laboral, porque la verdad es que nos está afectando negativamente a toda la familia. Me cuenta que los últimos 10 años hay un déficit creciente de controladores, y desde 2006 no han salido nuevas plazas. Yo he decidido hace meses tratar de buscar datos por mi cuenta, y sé que en Eurocontrol (www.eurocontrol.int) estiman en tres años el intervalo entre la selección de un candidato y su inicio como controlador operativo. Pero eso es en Europa, aquí el ministro ha dicho que está formando nuevos controladores exprés en unas semanas (ya le pasaré la lista de aeropuertos donde van a trabajar, por si quiere hablar con ellos; pero recuerde ir en coche o tren).
Le expliqué:
- Es que a AENA le sale más rentable cubrir un pico de demanda con horas extra.
- Desde el 11--S de 2001 hasta la crisis de 2008 el aumento de tráfico ha sido sostenido.
- Por eso os ofrecían más horas extra cada año.
- Mucha gente ya no quería hacer más.
Yo, que soy de mates, me conozco lo de la campana de Gauss; si la media eran 600 horas extra, la mitad aproximadamente hacían entre 0 y 600, y la otra mitad entre 600 e infinito (siendo precisos, no más de 9000, las horas que tiene el año).
- Alguno hacía hasta 1200 horas extra.
- AENA lo fomentaba pagando lo que hiciera falta, para cubrir el servicio. Un escándalo para la seguridad.
Mis datos: La jornada anual (ordinarias + extra) es de 1300--1400 horas en casi todos los paises de nuestro entorno (fuente: Eurocontrol), con dos posibles excepciones, Marruecos (ponen la cifra con números arábigos) y Andorra (no he encontrado en la web su empresa de navegación aérea).
- Y, ¿qué paso en Febrero?
- El ministro transformó las horas extra en horas de jornada ordinaria, obligatorias. Está encantado con una medida tan imaginativa de control de gasto.
- Menuda faena para los que hacían 2.000 y pico horas. Pasan a 1.750 pero se quedan con el sueldo ordinario, sin pagas extra.
- Peor para los que hacíamos pocas o ninguna hora extra. Pasamos de 1.200--1.300 a 1.750 y sin ver un euro más.
- Mujer, el sueldo habrá aumentado en proporción al aumento de jornada ordinaria.
- Nones. Nos lo han bajado.
Desde el punto de vista matemático hay dos formas equivalentes de verlo:
* Las horas de más las curran por el morro
* El sueldo por hora disminuye más de un 30 $\%$
- Mal que me bajen el sueldo así, pero que me dejen trabajar la jornada razonable de 1350 (valor medio en Europa, según Eurocontrol), por ejemplo. Por lo de la conciliación de la vida laboral y familiar. Y por seguridad. A nadie le gustaría viajar en un avión con el piloto cansado y falto de concentración. La gente no sabe que los controladores debemos cumplir requisitos psicofísicos similares.
- Es que entonces faltaría personal.
- Antes se resolvía con horas extra, es decir voluntarias. La jornada máxima es por seguridad (en qué mundo vive esta mujer, cree que la seguridad es prioritaria frente a la economía), y es responsabilidad de la empresa disponer del número suficiente de controladores para gestionar todo el tráfico en condiciones seguras. Que regulen el tráfico y cancelen vuelos.
- Y , ¿por qué tenéis que trabajar sólo 1350 horas?
- Es un servicio 24 horas al día, 365 días al año, y de gran responsabilidad. Tampoco en urgencia hospitalaria, o los bomberos, hacen las 1800 horas de un oficinista.
- Pero lo vuestro es como jugar a marcianitos en la playstation, manteniendo separados los puntitos de la pantalla. Yo creo que podéis trabajar 1800 horas.
- Tu crees, tu crees. Entonces, que la gente viaje en avión de lunes a viernes laborables por la mañanas. Tardes y noches, fines de semana, Agosto, Semana Santa y Navidad en tren.
Cuando se pone así, es mejor no insistir. Por cierto, aunque sobre temas de seguridad yo no entiendo, la gestión económica del ministro me parece genial. El gran problema de AENA es la deuda colosal, cósmica, que han generado los sucesivos gobiernos durante los últimos 10 años, con su política de inversiones faraónicas en aeropuertos nuevos y ampliaciones, que no nos podíamos permitir. Vamos, como con las universidades en los noventa.
Y lo va a resolver vendiendo el patrimonio del Estado. Es como si me pongo durante 10 años a hacer reforma tras reforma en casa, ampliaciones, tabiques nuevos donde no hace falta, un porche que nunca usaremos, y cuando viene el del banco a que pague el préstamo, le doy el piso. Privatización de beneficios y socialización de pérdidas, no sé si le suena.
El otro supuesto problema en la economía de AENA (la parte de navegación aérea es rentable, se transfiere déficit desde la parte de aeropuertos; contabilidad creativa) eran los gastos salariales, y lo ha solucionado en menos de una línea, las horas extraordinarias se convierten en ordinarias por decreto. Si las empresas privadas tuvieran a su disposición el BOE, otro gallo les cantaría.
El tercer problema de AENA no es económico, sino de seguridad aérea, pero ya hemos visto que no tiene solución a corto plazo; faltan controladores y, visto el periodo de formación y la capacidad limitada para dedicar recursos materiales y humanos a la misma, necesitaríamos de 6 a 8 a\~os para recuperar las jornadas anuales normales en Europa. En todo caso, el ministro Blanco no tiene la culpa de la mala gestión de personal de sus predecesores, así como el señor Lema tampoco es responsable de que los anteriores directores de AENA optaran por pagar horas extra masivamente (¿o si?, tengo que consultar cuándo accedió al cargo por primera vez).
En todo caso son responsables del último año de gestión, en el que tampoco se han convocado plazas. Ahora se forman controladores en otros centros, pagando, y en pocos meses. Vamos, que en Eurocontrol están desfasados con lo de los tres años de formación y habilitación. Algo deberían haber hecho en cuanto al déficit crónico de personal, desde 2006 no salen plazas. ¿Desde cuándo vienen preparando al privatización? Parece que en este largo periodo transitorio se han olvidado de la seguridad, un descuido lo tiene cualquiera.
Bueno, algo han hecho en gestión de personal, según cuenta mi mujer. Srta. Francis, por preocupantes que le parezcan las siguientes líneas, no se le ocurra divulgarlas, en especial en los países de donde vienen los turistas; su difusión pública podría provocar pánico. Son probablemente alucinaciones de un alma herida, aunque yo no puedo evitar dar más crédito a mi mujer que al ministro Blanco (póngase en mi lugar).
Lista de actuaciones de AENA en 2010
* Enviar a los inspectores médicos de la(s) SS para dar las altas exprés (remedios económicos exprés, formación exprés, altas exprés, ¿por qué tanta prisa?) a los tramposos y perezosos controladores de baja. Según Blanco, el 70 % recibieron el alta médica. La cara B de la historia es que la gran mayoría no se incorporaron a puestos operativos, ya que la inspección médica específica (creo que se llama el CIMA) no les dio el alta. ¿Puede uno estar sano y de baja al mismo tiempo? Si tengo dolores de cabeza y mareos, o ansiedad, normalmente me las arreglo para dar mis clases, sin necesidad de pedir la baja. Resulta que un piloto o un controlador no pueden trabajar si les pasa lo mismo, que morro. Resultado de la medida: menos controladores. Los tramposos eran en su mayoría controladores que hacían pocas o ninguna hora extra en 2009; les habían aumentado un 40 por ciento su jornada anual con disminución de sueldo, les habían impuesto medidas que daban lugar a mayor presión en su trabajo, dificultades para organizar sus turnos y compatibilizar la vida laboral y familiar, disminución del descanso en los turnos y de días libres, etc. Algunos fueron víctimas de la ansiedad o la depresión; seguro que si es pasajera de un avión no le gustará que el piloto esté en esas condiciones. Por eso no superaron el control médico, todavía hay profesionales que velan por nuestra seguridad en vuelo.
* Juntar sectores antes de tiempo y retrasar su separación. Esta medida es genial, de alguien con visión matemática. Un sector, un controlador; n sectores, n controladores (con n un número natural). Los sectores aéreos son dinámicos, no fijos. Así, cuando a lo largo del día pasamos de una hora valle a una hora punta, hay que desdoblar sectores para que los movimientos gestionados en un sector no superen los límites de seguridad. Atrasando el desdoblamiento de sectores nos ahorramos algunos controladores; del mismo modo, se ha adelantado la fusión de sectores cuando salimos de la hora punta. El controlador puede acabar con el cerebro recalentado, pero miguita a miguita ahorramos en personal del que andamos tan escasos.
* Cuando se sale de noche, la siguiente mañana y tarde se consideran día libre (viene bien para acumular turnos cuando falta personal por vacaciones o lo que sea). Mi hermana es enfermera y dice que eso es imposible. Pero yo lo veo lógico: ¿tienen o no tienen la mañana y la tarde libres?. El mismo razonamiento se puede aplicar a un oficinista; cuando sale a las 3, tiene toda la tarde y toda la noche libres, total 5 días libres de lunes a viernes. Podrían trabajar los fines de semana (que seguirían siendo días libres) y despedirse de las vacaciones.
* Hay que devolver las horas aeronáuticas operativas (se refieren a las horas de 60 minutos de toda la vida; estos, con la fraseología, quieren que no nos enteremos) que no se hayan trabajado por.
- Cursos de formación obligatorios (si los hubiere).
- Licencias y reducciones de jornada (sin devolución del sueldo descontado)
- Bajas por incapacidad laboral (seguro que esto NO es verdad; lo he leído en el BOE, pero no estoy seguro de que sea una revista de información seria)
* En vez de 3 controladores por puesto y turno, se programan 8 controladores cada tres puestos. Ocho tercios de controladores por puesto. Cuando uno está en la frecuencia y otro de ayudante, el tercero esta descansando en sus dos tercios, y en otro sector el tercio restante. Lo de los tercios era indicativo de que acechaba la militarización.
Resultado, 11 % menos de personal, y 25 % menos de descanso (se deja como ejercicio para el alumno comprobar estas cifras).
* Aumentar un 10 % la programación para un sector respecto de su capacidad máxima (como meter 7 en un seiscientos, poderse se puede, yo lo he vivido en persona; otra cosa es que todos lleven el cinturón de seguridad). En principio no se puede hacer, pero han encontrado un truco muy habilidoso para conseguirlo. Sea S un sector que admite un máximo de 40 movimientos a la hora; como siempre hay imponderables, se estima en un 10 \% la holgura, lo que se traduce en que esporádicamete puede haber 44 movimientos en una hora. Tachán: programemos 44 movimientos por hora (si puede haberlos, puede haberlos). Obviamente, por algún imponderable podría subir a 48 el número de movimientos, que ya sería un 20 % superior al máximo inicial. Y ahí se han quedado. Con una visión más matemática, habría caído en la cuenta de aplicar la inducción: si puede llegarse a 48 movimientos, programemos 48, con lo que se puede llegar a 53; programemos 53 y puede llegarse a 58, … De nuevo, la respuesta no es del todo satisfactoria. Al igual que no se pueden hacer infinitas horas extra porque las del año son 9.000, tampoco caben infinitos aviones en un sector. Teniendo en cuenta que el volumen del sector es finito, dividido por el volumen de un avión promedio, dará necesariamente un resultado finito. Desde el punto de vista de la seguridad, la situación sería óptima, con unos aviones apoyados en los de debajo y sin posibilidad de caer.
* Cursos de formación inexistentes. Esta es una No medida, pero no es nueva. La formación continua es necesaria y obligatoria, pero no nos la podemos permitir. El que quiera seguridad que se la pague.
* Exceso de turnos seguidos sin días libres. 28 días programados en Agosto, 43 días libres en 2010 (sume los suyos, incluyendo fines de semana, pero no vacaciones). Falta personal, sobre todo en periodos de máxima demanda. Si esto se lo programaran a un piloto, ...
* Programación de turnos con 5 días de antelación. Este año no podemos hacer planes a medio plazo. No sabemos los turnos de mi mujer a más de 30 días vista, a veces, a una semana. Somos plenamente conscientes de lo que ha pasado; a partir de cierto nivel de ingresos, los derechos laborales se han suprimido en este país. Quiero decir, para cierto nivel de ingresos, se han suprimido por arriba y por abajo.
* Espectacular: han conseguido prolongar el verano a cuatro meses, de 1 de Junio a 30 de Septiembre. Ya sabe que el Estatuto de los Trabajadores fija el derecho de todo trabajador a disfrutar de una quincena de vacaciones en verano. En vez de saltárselo a la torera como en otros aspectos, aquí han decidido modificar la velocidad de traslación de la tierra en su órbita alrededor del sol para conseguir que algunos controladores disfruten de su quincena de verano del 1 al 15 de Junio, o del 15 al 30 de septiembre. No quiero imaginar las consecuencias ``planetarias'' para el cambio climático.
* Presiones para cumplir los máximos en condiciones meteorológicas adversas. Ni la niebla ni el viento frenan las ansias de cumplir los máximos, estimados para condiciones favorables. Recuerde, si al ir al aeropuerto su vuelo tiene cierto retraso, puede ser por regulaciones, por motivos de seguridad, para no sobrepasar la capacidad de gestión del servicio de navegación aérea. Sea positivo y piense que alguien vela por su seguridad. También puede ser por condiciones meteorológicas, por retrasos del vuelo en origen, por mala gestión de la compañía aérea, por problemas de personal en cualquiera de los ámbitos involucrados en un vuelo comercial, etc. Todas estas razones, sin embargo, han estado ausentes durante 2010, ya que cualquier retraso fue debido a los malditos controladores.
* En estudio, puestos sin ayudante, o sea, monocontrol. Esta es otra no medida, por ahora. Por lo visto se implantó durante un tiempo en Suiza, pero hubo de retirarse tras un gravísimo accidente. En España, sin embargo, podría tener éxito, al menos desde el punto de vista económico.
Una consecuencia directa de las anteriores medidas ha sido el aumento espectacular de incidentes de colisión en 2010 respecto a años anteriores, un asunto bastante grave teniendo en cuenta que partíamos de una situación francamente mejorable (y, por lo que se ve, empeorable). El miso día 3 de Diciembre (si, si, el 3) hubo un incidente de colisión de clase A, o sea, la madre de todos los incidentes antes de una colisión real. No es que los gestores no dispongan de estos datos, ni que no sepan cuáles son las medidas a adoptar para corregir la situación. Simplemente cruzan los dedos, porque su objetivo, largamente planeado, es la privatización de AENA y eso son palabras mayores. Yo ya tengo los dedos agarrotados, y últimamente enciendo dos velas diarias, una a Dios y otra al diablo, para no dejar flancos descubiertos, ya que no sé de qué pie cojea el intermediador. La empresa que gestiona Heathrow, que se quedó sin anticongelante y dejó en tierra a cientos de miles de pasajeros en el último temporal, es una de las que optará a la gestión de aeropuertos españoles en el próximo concurso. Todo es susceptible de mejorar.
En todo caso, soy parte interesada en el asunto, por vía conyugal, así que le pido consejo, como persona independiente y objetiva que le considero. Seguramente habrá recibido otro tipo de información de la parte contratante de la primera parte, como por ejemplo las siguientes
Leyendas urbanas sobre ATCO
- En España faltan controladores. Según publicó el periódico El País el 5 de Diciembre, en Francia hay 2600 controladores y en España 2200 (fuente: AENA y elaboración propia), la diferencia no es tanta. También en Agosto publicaron, respecto a una posible huelga en Francia, que era posible el paro de los 4400 controladores franceses (fuente: France press). Solemos mezclar información y opinión sin distinguirlas claramente, pero si mentimos en los datos objetivos apaga y vámonos. Lo más probable es que se hayan jubilado o muerto 1800 controladores franceses entre Agosto y Diciembre. ¿O el objetivo es desinformar?
- Bloqueo del colectivo al acceso de nuevos controladores. O sea, si faltaran controladores, que no faltan, sería culpa suya, por impedir que AENA seleccione y forme más personal. De este modo, podrían forzar a la empresa a ofrecerles muchas horas extra, si faltaran controladores, que no faltan. Ahora que caigo, como no faltan controladores por eso no han sido necesarias horas extra en 2010. Lo difícil es determinar el mecanismo por el que los controladores bloquearían las nuevas contrataciones. Es tan difícil que nadie lo sabe. Muy, muy difícil; desde 2006 no hay convocatorias, y sin candidatos no hay a quién bloquear el acceso.
Quizá bloquean el acceso suspendiendo a los candidatos en los cursos de formación. Basta mirar los datos de los últimos cursos impartidos para ver que un 99% los superan. Aun así no hay que fiarse, mejor que no intervengan en la formación: que los cirujanos cardíacos formen controladores y los controladores cirujanos cardíacos.
Vuelos de urgencia médica con el espacio aéreo cerrado. Para mí, es el caso más sangrante de perversión en la campaña de descrédito y criminalización que ha sufrido mi mujer y sus compañeros. En la tarde--noche del 3 de Diciembre y la mañana del 4 un posible traslado urgente de un órgano de donante para salvar la vida de un enfermo necesitado no podría haberse llevado a cabo (Fernando Berlín en la SER, 7 de Diciembre) por estar el espacio aéreo cerrado. Es fácil imaginar la reacción emocional que produce esta noticia en los enfermos, sus allegados o cualquier persona con suficiente empatía, especialmente si también se vio afectada por la suspensión de los vuelos. Podemos añadir con un poco más de imaginación que tampoco el traslado urgente de un herido en montaña, o el servicio de avión cisterna para apagar un incendio, podrían realizarse en estas circunstancias. ¿Y si nos invaden los enemigos? Cachis, nos pillan sin defensa aérea militar. Porque el espacio aéreo está cerrado, o sea, que han bajado la persiana y no pasa nadie. En frío, aislándose de las emociones, propaganda y prejucios acumulados, es una chorrada que no engaña ni un instante, ni siquiera a los más ingenuos. Pero coló con toda naturalidad, lo que demuestra hasta qué punto nos han dejado faltos de espíritu crítico estos doce largos meses de campaña gubernamental y mediática. En contra de un colectivo insustituible a corto plazo, y cuya labor tiene gran repercusión económica en el país. La reacción ante estos bulos es normal, que se vayan, que los echen a todos. Es de locos.
Que se vayan o que los echen; a mí me viene mejor que los echen, por lo de las indemnizaciones. ¿Y después qué? Los planes B (nuevos controladores), C (controladores militares) y D (controladores extranjeros) del señor Blanco no son creíbles. Los nuevos controladores exprés no están capacitados para trabajar en la torre de Barajas o el centro de control de Torrejón, por ejemplo, aunque puedan trabajar en la torre de El Hierro, con unos pocos movimientos diarios. No hay suficientes controladores militares y tampoco se pueden incorporar inmediatamente. Y no hay controladores europeos deseando venir a trabajar a España por las privilegiadas condiciones económicas y laborales de aquí. Navegue un poquito por la red, busque la opinión de las organizaciones sindicales y profesionales de controladores en Europa y en el mundo sobre la situación española. Compare los ingresos de los controladores españoles, franceses y portugueses, por ejemplo, pero sin demagogia, mismo salario a misma jornada. Si usted y yo trabajamos en una empresa y yo hago un 50% de horas extra no puede escandalizarse de que cobre mucho más. Obviando que hay razones de seguridad para limitar la jornada anula a 1300--1400 horas, calcule el salario equivalente a igual jornada en estos tres países. Hágalo y se sorprenderá. Por algo proponía el sindicato USCA unas condiciones laborales y económicas equiparables a las de los controladores portugueses. Y el señor Blanco, ¿que ofrece?, ¿el convenio laboral marroquí?
Srta. Francis, aunque mi mujer no quiera, tiene que cumplir las leyes del gobierno nacional (y socialista). Como no vemos salida, le he dicho que renuncie a su contrato, que ya nos arreglaremos. Dice que tampoco eso, que le acusarán de traición a la patria y deserción (últimamente viste mucho de uniforme), y la llevarán a la cárcel. Como solución transitoria a nuestras desavenencias conyugales puede ser una opción a considerar. Por apoyar esta idea, a mí me parece la cárcel (siempre que vaya ella) un mal menor frente a la posibilidad de provocar un accidente con cientos de muertos, debido a sus kafkianas (¿privilegiadas?) condiciones de trabajo.
En fin, son demasiados interrogantes, pero confío en que pueda orientarme. Por mi parte, le ofrezco un sincero y afectuoso consejo: si puede evitarlo, absténgase de volar en España, al menos durante las próximas dos o tres legislaturas.
Suyo affmo.
Un marido descontrolado
Carlos López Lacasta, profesor de la UAH.
0
0
