Hoy hago el inventario de los saldos de octubre… este año es diferente, hasta ahora puedo hacer cuentas de lo que hay en el debe y el haber de mi vida. Los últimos tiempos, la empresa de mi existir estuvo funcionando en base a pérdidas.
Este octubre deja muchas cosas… pequeñas y grandes, aprendizajes incalculables y muchas ganas de seguir. En el primer paquete de sobrantes, se encuentra el clima, tardes y mañanas llenas de lluvia, días que parecían no ceder jamás con la humedad, grietas nuevas donde entra el agua, y un par de brazos que funcionan a la perfección para limpiar los excesos de las tormentas.
Segundo paquete, un poco más pesado y grande, sobre todo por la angustia que genera no ser vendido, le llamaré, 'baja de pacientes', lo que se traduce en mañanas y tardes libres por completo. Al principio una sensación de libertad, seguido de preocupación por pagos pendientes; cierro con fe y esperanza que nuevas personas se acercaran y entraré en el ciclo de atención diaria de nuevo.
Los dos saldos anteriores, trajeron algunos regalos. El primero de ellos fue apreciar en el tiempo libre el cielo y descubrir que después de la lluvia los niños se decidieron a adornar las nubes con sus barriletes. No hay una tarde que no haya podido apreciar su ondear por mis ventanas. También he sido testigo de aquellos barriletes que sus dueños no han podido manobrear y han quedado atrapados entre las ramas de los árboles; como los humanos cuando nos enredamos.
En este octubre aprendí sobre la responsabilidad, esa a la que tantos le huyen. Puse mis cuentas en orden y acepté de una vez por todas que pagar impuestos es una realidad que no puedo obviar.
Otro saldo que pasará a ser parte del los meses venideros son los amigos, no importa ni el tiempo ni la distancia de por medio, cuando la semilla de la amistad ha quedado resguardada por el amor y los buenos deseos.
Cierro el mes con la persecución de mis sueños, no sé si los alcanzaré, pero me comprometo hacer lo que esté de mi parte, dando mi mejor esfuerzo.
Hay Octubre !! Gracias por mostrarme que donde estoy es donde debo estar, que lo que hago es lo que debo de hacer y que cada detalle a mi alrededor fue puesto para deleitarme en esta maravillosa vida.
Gracias de verdad…