Inamatus

Rogue a Dios un sueño,

un milagro,

un diamante de egipto.

...

¡Supliqué ser feliz!

¡¿Cómo?! exclame,

¡¿Dónde?! cuestione

y alguien con voz de olimpo y piedad por una tumba respondió:

¡ahi esta, se feliz!

Crei...Corrí y ame,

di mi cuerpo y en él enterrada mi alma;

Tuve la esperanza de encontrar un nuevo corazon.

Dí el mio.

Comprendí los designos celestiales,

interprete tus ojos,

bese tus labios,

tome tu cuerpo a cambio del mio,

te dí mi corazon...pero nunca el tuyo mío.

Grite..¡Dios mio yo era feliz, hazme volver!

Dame ese corazón otro no quiero...

pero, el silencio llego esa noche;

No hubo más suplica,

no hubo más ruego,

las voces callaron...

Era un pasado,

era un sueño,

Era el AMOR,

Era la muerte,

era el sepelio de un alma redimida,

que conoció la felicidad.

Era mi alma inamatus.