En realidad, el fósforo no es un elemento tan escaso. Solo es muy, muy utilizado ya que forma parte de muchas de las moléculas imprescindibles para la vida en la Tierra. Simplemente insustituible, nuestra agricultura y ganadería están empezando a utilizar más de lo que podemos conseguir. Y eso significa problemas.
El fósforo representa entre el 0,5 y el 1% por ciento de nuestro cuerpo. Pero es una cantidad crítica si tenemos en cuenta que forma parte de las moléculas de ADN y ARN. También da nombre a la fosforilizaciónque es un proceso clave para la regulación de proteínas y enzimas. Y controla toda la producción de energía que utilizan las células al tratarse de componente esencial del adenosin trifosfato o ATP. Por eso, no es extraño que se le considere un elemento químico esencial para la vida. Su presencia es imprescindible para permitir el crecimiento de las plantas y, debido a ello, un fertilizante típico suele incluir nitrógeno, fósforo y potasio en forma de diversos compuestos químicos.
¿Por qué debe preocuparnos los fertilizantes? Básicamente porque los necesitamos para vivir. El crecimiento de la población, y algunas hambrunas, han estado asociados a la facilidad para conseguir estos elementos y así aumentar la producción agrícola. El nitrógeno forma la mayor parte del aire que respiramos y dejo de ser un problema a principios del siglo XX gracias al proceso Haber-Bosch. Tenemos suficiente potasio para no preocuparnos por mucho tiempo. Pero el fósforo empieza a volverse escaso. Aproximadamente dos tercios de las reservas mundiales se encuentran en China, Marruecos y los territorios en disputa del Sahara occidental. Naturalmente no es que vaya a desaparecer, simplemente su precio empezará a subir y dejará de estar disponible para muchos pequeños agricultores de los países mas pobres.
Ciclo de fósforo. Fuente: Universidad de Castilla – La Mancha, Antonio F. Antiñolo.
¿Podemos conseguir fósforo cuando las minas se agoten?. La parte mas fácil y rentable es la recuperación a partir de las aguas residuales y ya hay empresas que lo consiguen. Desgraciadamente, solo es una pequeña parte del fósforo que utilizamos. Salvo grandes avances tecnológicos, se espera una creciente escasez, un incremento considerable del precio y numerosos conflictos internacionales. Este proceso ya ha empezado. El fósforo procedente de las minas se vuelve cada vez más escaso y caro. Entre 2003 y 2008, el precio del fósforo subió un 350%. Mientras la población suba, la demanda de alimentos subirá. Y la sobreexplotación agrícola obligará a aumentar aún más el uso de fertilizantes.
Quizás buscar nuevas fuentes de energía que sustituyan al petróleo va a ser la parte fácil. La Tierra soporta mucha mas población humana que nunca en su historia. Nuestras alternativas son más tecnología, menos población o ambas cosas. Y tiene que ser rápido.
Fuente:
Fósforo, administrando la escasez