José María Firpo ha sido, antes que nada, un maestro de escuela. Nació en Paysandú, Uruguay, y se graduó de maestro en 1938. A los 16 años se trasladó a Montevideo donde ejerció en diversas escuelas primarias de varones. Murió el 27 de agosto de 1970, entonces su ciudad natal lo homenajeó dándole su nombre a una escuela rural.
Su labor no terminó en el aula, sino que se extendió a la vida personal de sus alumnos, siguiendo sus pasos, gozando y sufriendo según fuera el azar de cada uno.
Su recopilación de los dichos y escritos de sus alumnos —y de sus padres— son el resultado tanto de la observación como del cariño. Hay en ellos un humor ya surrealista, ya grotesco, pero nunca arbitrario ni ofensivo.
Podríamos decir que es un recopilador de la 'sabiduría' infantil.
Recopilación de textos del libro 'Que porquería el Globulo'
· Vivían en los terrenos baldíos.
· ¡Si habrá pescados que cuando vino Solís los indios pescaban y nosotros seguimos pescando!
· Ellos se vestían con ropitas cortas hasta que los católicos les enseñaron a escribir.
· Las ropas eran así: usaban una vincha en la cabeza, con plumas.
· Para prender fuego golpeaban dos piedras y en cuanto saltaban las chispas arrimaban un papel.
· Las mujeres eran muy descansadas porque lo único que hacían eran hacer comida, curtir pieles, cargar los hijos, juntar leña, prender fuego, cocinar, cazar bichos que pasaban cerca mientras trabajaban, y los indios hacían lo demás que era lo más pesado.
· Los españoles siempre los emborrachaban y después los hijos les salían desastrosos.
· Los españoles les decían:-'Vení, che Abayubá, que te voy a enseñar a tomar grapa'.
· Después que los indios se mamaban empezaban a recorrer boliches y nadie los entendía porque no se sabía qué idioma hablaban.
· Todos los indios eran piojosos, podridos, sarnosos y sucios. En aquellos tiempos se levantaban sin lavarse porque no había canillas. Y siempre estaban jediondos y tenían piojos, chinches, liendres y otras porquerías, más la sarna.
· No tenían ideas ni para lavarse.
· Hablaban con sonidos culturales.
· No eran celosos pero era mugrientos.
· La diferencia de nosotros con los indios es muy fácil: ellos dormían boca arriba y nosotros dormimos de costado.
· Maestro: Sin embargo mi tío duerme boca arriba y no es indio.
· Cuando se casaban no se casaban con iglesia, ni con cura, ni con autos; le dirían, vení vamos.
· Hablaban así: AS BIGORTI ETETSJI J 95, porque no podían hablar como nosotros.
· Los curanderos a los enfermos les daban un chupón en la barriga y todo arreglado.
· El curandero les chupaba el estómago con fuerza porque a lo mejor no se usaba té de yuyos.
· Para curarlos les chupaba la barriga. Y si los indios que había aquí eran como 5.000, ¡cómo chuparía barrigas!
· Se podían casar a la edad que ellos querían y por eso, digo yo, no saldrían con mujeres, mi andarían chineando de noche porque en ese tiempo no había luz eléctrica, como ahora.
· Cuando había guerra cada uno se quedaba con el botiquín que podía.
· Cuando agarraban a un enemigo no lo dejaban sagaz, que quiere decir que no lo dejaban vivo.
· Parece que hablaban con la nariz.
· Por ejemplo, hablaba un indio y usted no entendía un carajo.
· Hablaban en gutural con la garganta.
· Eran nasales, que quiere decir que hablaban sonando las narices.
· Yo trate de hablar con gutural y con nasal, como los dos indios, pero mi mamá no me dejó de miedo que me quedara afónico.
· No se sabe qué idioma hablaban porque no se hacían grabaciones como ahora, y cuando hablaban con la nariz y la garganta no se entendían y ellos dirían: '¡Y bueno, mala suerte!' Y hablaban cada vez menos y así se fueron quedando taciturnos.
· La desaparición de los indios fue así: desaparecieron.
· Tenían muy pocos pensamientos porque eran muy turros.
· Hablaban así yo digo para que no los entendieran los enemigos.
· Los indios comían mucho fideo. El maestro no dijo si tomaban mate.