- Qué culpa tiene el tomate que tranquilo está en su mata para que venga un hijo puta y lo meta en una lata.
- Payaso... Cuán feliz eres que puedes llorar o reír al son que te tocan, pero cubierto con el afeite esperpéntico que hace que no seas tu.
- ¿Voy a quedar en la memoria de mis coetáneos? ¡No! Ellos se irán conmigo al silencio último. Lo que trato de arrancar a la eterna nada actual es una brizna de mi ser fugaz y atormentado (En la desesperanza).
- Acaso martiriza a la mariposa la llegada del invierno teniendo por delante la primavera y el verano para volar en libertad...
- Por favor, que paren el mundo que yo me quiero bajar. ¿Y usted...?
- Dicen que el Creador hizo el mundo en seis días, el séptimo descansó, el octavo pasó al paro y desde entonces vive como Dios.
- La retentiva es el sello de la capacidad.
- Sea cual sea tu cargo o posición dentro de tu entorno laboral, siempre, siempre, serás el director ejecutivo de tu vida interna.
- Vivimos en un eterno bosque inanimado de peripecias sin una lógica aparente.
- Es infinitamente mejor retozar y acostarse encima de la hierba de un huerto que descansar debajo.
- Siembra miedo y recogerás sumisión.
- Madre hay sólo una / y aunque un día la olvidé / me enseñó al final la vida / que a ese amor hay que volver.
- ¡La vida traiciona como la electricidad!; sabe permanecer en latencia cubierta con piel de cordero para, cuando los hados le sean propicios, saltar cuan perro rabioso y mostrar cuánto lleva dentro.
- ¿Desdeño al futuro? Nada más lejos de la realidad. Lo que tengo por inútil es el presente que me rodea, ayuno de nervio y virtud.
- A ti, gusano, te llamamos vil por comer tus excrementos, cuando nosostros, que nos llamamos ¡humanos!, nos refocilamos restregándonoslos continuamente unos a otros.
- El Diablo es un optimista si piensa hacer peores a los hombres.
- Podréis sacarme los ojos, trepanarme los tímpanos, arrancarme la lengua y horadarme el cerebro, pero el último pensamiento será siempre mío -¡mío!- y nadie -¡nunca!- podrá arrebatármelo.
- ¿Qué me impide dar un paso hacia la fe? La fe, tajantemente.
- No pretendo saber más que otros y concedo de buen grado que lo que me parece inconcebible a la luz de lo poco que creo saber, pudiera dejar de parecérmelo a la luz de lo que ignoro.
- Verdad sólo hay una, aunque la indiferencia nos haya sumergido en la cloaca fatal del fracaso.
- 'Hombres, no os regocigéis con su derrota, pues aunque el mundo se puso en pie y detuvo al bastardo, la perra que lo engendró vuelve a estar en celo' (Al dictador caído).
- Intento buscar explicaciones... que, al contrario, me alejan del hoy y me rebujan en los pliegues de mi conciencia, a leguas de distancia de lo que puede ocurrir.
- Soy como una rama caída en el lecho de un río -la vida- que la corriente orilla (En la desesperanza).
- 'Me considero agnóstico, pues las relaciones no van de Dios a nosotros sino únicamente de nosotros a Dios. En una palabra, un agnóstico como Dios manda' (Tierno Galván).
- Inquietud ¿por qué no me abandonas? Te valoro, te estimo, te comprendo. Pero eres un tormento fijo y permanente que me impide mirar al infinito con la vista fija, serena y sonriente...
- Lo imposible lo hacemos de inmediato, para los milagros tardamos algo más.
- No es más rico el que más tiene sino el que menos necesita.
- Seno que mano no cubre no es teta sino ubre.
- Es bueno ser importante, pero mucho más importante es ser bueno.