Echo para ti, mi Lucecita.
Espacios de ausencia
E poseído el sueño
de encontrarte en sombra entristecida
ceñida a mi cuello
en donde nuestros labios se unían
y en el que mis manos
anhelaban concederte mimos en tu pelo encarnado.
E obtenido el sueño
de que nuestras almas se unían
en donde de nosotros
corporaciones humanas no alcanzaban
por la fugaz distancia.
E amanecido en un lecho fragante
oloroso a tu cuerpo
y amargamente desolado.
¡Hoy no es el día!..
de un apenado retorno a los caminos
colmados de espacios de ausencia.
¡Es tu ausencia!..
en días tranquilos de hoy
¡Y tú distancia!..
en mis dominios de hoy
en donde mi clarividencia transita
a las espaldas de tus memorias.
Que agriamente me comprendo…
encontrándome sin ti
solo y desolado en mis imaginaciones…
te obtengo tan inminentemente
tan próxima a mí.
Lo que obtengo concebir por ti en este momento
es la nada…
de lo que alcance concebir por ti
una vez que muy prontamente convivamos en unión.
¡Y es que mi existencia sin ti!..
es la libertad de mi espectro oscurecido
en el que amargamente capitanee en tenebrosidades fantasmagóricas.
¡Si solo descubriese las palabras!..
que me urgen
para exponerte cuantiosos sentimientos de emociones hacia ti.
El echo en si…
de adquirir los amaneceres
en tus brazos desarropados
sintiéndome existencia eterna.
¡El que lograras leerme en mis ojos!
en donde nadie alcanzo
el nado de la otra orilla mía.
¡El que lograras componer el semblante!
de mi espíritu peregrino…
en el que ninguna vez
se halló un dios que lo serenase.
¡Todo en ti!..
se me transfigura en emociones existenciales
tan distantes que se hallaban de mí.
¡Me rehago!..
a sentimientos halla arrinconados en las épocas.
¡En mis ojos!..
que te juro que me lagrimean en este soplo
¡No es por un tiempo perdido!..
es por el espacio
en el que anhelo el compartirlo todo
¡Contigo!..
mi alma idéntica.
Retorno del silencio.