Curando heridas con mis recuerdos

No hay nada como dejar que nazcan ideas
que nuestra mente mire y se conmueva
que los recuerdos ocupen sus motivos
para sentirse que aún solo, uno está vivo
En este creer, aburrido en busca de un qué hacer
redescubro cosas que siempre han estado
Es ese gran error que como humanos
tan sólo declaramos cuando no tenemos
Parado en el espacio que se pierde en la memoria
tratando de encontrar algo ya perdido
como quien no se ha en tiempo movido
detallo la alfombra, miro al suelo
ambos, testigos inmutables de mis pasiones
Siento dentro de mi cuerpo un leve escalofrío
al topar aquél espejo en el que solías mirarte
La mesita de noche, aquella lamparita
de múltiples colores, de luces cristalinas
que generaban sombras todas con vida
de las contorsiones, como de las pasiones
que en la cama, muda, mas, testigo real
de los tantos y hermosos encuentros
En mi paneo, sigo, veo los discos, la música
sacudo un poco el polvo del olvido
y salta como del nido, un pájaro amarillo
es aquella carta que una vez, salió
de un corazón sediento de amor
brotó de un suspiro, quizás de una lágrima
No lo sé, se confunden los sentires
cuando se mira con cariño al pasado
Ocurre que con el tiempo, me he olvidado
¿De quién soy, qué soy y qué quiero?

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