Todo tiene un Norte

Si una nave espacial se encontrase viajando por el espacio, dicha nave podría viajar boca abajo y sus tripulantes podrían no apercibirse de ello; ya que al no existir gravedad en la nave, sus tripulantes no percibirían donde está lo de arriba ni lo de abajo del espacio. Tampoco sabrían cual es el Norte real del espacio que les rodea, ni si la derecha y la izquierda de la nave es realmente la derecha y la izquierda del Universo.

En el futuro sería conveniente que las naves espaciales se situaran en el espacio, no sólo con respecto a la Tierra, como lo hacen actualmente, sino también con respecto al Universo. Que por ejemplo se escogiera una estrella, la que se crea más conveniente, y se eligiera a esa estrella como Norte geográfico interestelar, para que así pudiesen saber los tripulantes de dichas naves, si se dirigen hacia el Norte, Sur, Este u Oeste tomando como referencia el Norte puesto a dicha estrella. De esa manera, también podría saberse cuál sería la derecha y la izquierda del espacio que cruzasen, ya que se tomaría como referencia la derecha y la izquierda de dicha estrella. Y como no, tomando también como referencia ese Norte de la estrella, se podría saber donde está lo de arriba y lo de debajo de la nave con respecto a dicho Norte. Lo de arriba sería lo de arriba de la nave y lo de la propia dirección donde está la estrella y lo de abajo sus contrarios. Entonces existirían dos arriba y dos abajo.

Realmente existirán infinitos arriba e infinitos abajo alrededor de la nave, como ya explicaré más adelante. Aquí, en nuestro planeta, como todos sabemos, sólo existe un arriba y un abajo. Entonces, visto desde dentro de la nave, la dirección hacia la derecha y hacia la izquierda de la nave se podrían definir también como lo de arriba y lo de abajo; así como las direcciones hacia las cuatros esquinas de la nave, como también las direcciones hacia sus infinidades de lados posibles; con lo cual, en el espacio, lo de arriba y lo de abajo serían infinitos arriba y abajo como si fuesen infinitas dimensiones. Por consiguiente, sólo existirían las dimensiones fijas en lugares como la Tierra donde la gravedad ha posibilitado que existan dichas dimensiones fijas. Entonces, en el espacio, en donde no existan fuerzas gravitatorias, las dimensiones serían infinitas, lo de arriba y lo de abajo existirían en todas partes. Esto demuestra, que las dimensiones no existen realmente, que es como decir que las dimensiones son infinitas. Las dimensiones sólo existen donde se crean, donde existe una gravedad que las crea.

En el caso hipotético de que dicha estrella fuese rebasada por la nave, al dejarse atrás a la estrella; con respecto a la estrella, la derecha de la nave se transformaría en la izquierda y la izquierda se transformaría en la derecha. La estrella en lugar de ser el Norte sería el Sur; la referencia de lo de arriba se habría transformado en la referencia de lo de abajo, con respecto a la dirección en donde está esa estrella. Eso demostraría que no existe ninguna estrella ni ninguna referencia espacial que pueda ser un Norte exacto; puesto que todo lo que contiene el Universo podría ser rebasado.

Sin embargo, al igual que existe un Norte magnético en la Tierra, aunque ese Norte no sea exacto ya que se desplaza unos 40 Km cada año; también podría existir un Norte expansivo universal. Tal vez ambos Nortes, el de la Tierra y el expansivo, sean el mismo Norte, ya que también el Universo se desplaza.

Si no fuesen el mismo Norte, el de la Tierra y el expansivo, estoy seguro que podría construirse una brújula, quizás, magnéticamente mucho más sensible que la actual, capaz de detectar el Norte magnético expansivo, o sea la dirección por donde se expande el Universo. Puesto que si todo se expande, atómicamente todo debería de adquirir una atracción expansiva; por lo tanto todo debería poseer un magnetismo expansivo.

Me gustaría saber el comportamiento de la brújula fuera del espacio terrestre. ¿Qué Norte magnético señalaría?, podría ser importante; aunque seguramente ya habrá sido probado.

Como ya he dicho antes, tal vez, el mismo Norte magnético terrestre pudiera conllevar la misma dirección magnética que conlleva el Norte magnético expansivo del Universo. Dirección magnética expansiva que también podría sufrir los mismos cambios terrestres, aunque lógicamente en proporciones universales; ya que todo el Universo se mueve al mismo par expansivo. Entonces, si los desplazamientos magnéticos terrestres marcasen, lógicamente en proporciones más pequeñas, los mismos desplazamientos expansivos universales, se podría medir matemáticamente los desvíos universales y así se podría saber las dimensiones reales del Universo.

Quizás, así se logre demostrar que el Universo es un orden dinámico y que todo expansiva magnéticamente se ha construido conforme a ese orden dinámico. Con lo cual, también los átomos podrían ordenadamente poseer su Norte magnético; puesto que todo está inducido magnética expansivamente en la misma dirección; y por eso mismo, todo debe de haber adquirido dicho magnetismo. En el caso del Norte magnético de los planetas, es posible que los sistemas planetarios se hayan creado sus propios magnetismos, o sea sus propios Nortes magnéticos; y que eso afecte a todo lo que existe en el propio sistema planetario, sin poder evitar que también se vean arrastrado por la inducción del Norte magnético expansivo del Universo.

Registrado en Safe Creative el 25/03/2012

Autor: Salvador Sánchez Melgar

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